Gracias a todos los maestros que inspiran, que pelean por la escuela, que conmueven por su esfuerzo, que transitan la vida con real vocación y dedicación, gracias a todos los que hacen más de lo posible, que se reinventan a diario, gracias a los maestros que despiertan la admiración, confianza, a todos los que demuestran cuanto les importa, a los que se juegan por los chicos, a los que nunca bajan los brazos. Gracias a los maestros que encienden la imaginación, a los que hacen soñar, a los que entregan amor. Gracias, mil gracias a los maestros argentinos que aceptan los retos de la sociedad de hoy por el mañana de nuestros niños.
¡Feliz Día queridos maestros, sigan iluminando los mundos de cada uno de los niños que están en las aulas de una escuela!